La influencia que se da por parte de otras personas, produce un cambio de valores y creencias en las personas que son influenciadas, por lo que ocurre el fenómeno de la presión social, bastante frecuente en la población y que la mayoría de las ocasiones, pasa desapercibido.
Las consecuencias que se sufren debido a las influencias, pueden resultar bastante obvias desde el punto de vista general, ya que produce una cierta inseguridad sobre los pensamientos, gustos o físicos, sentimiento de inferioridad y una falta de pensamientos u opiniones propias, pudiendo tener una personalidad superficial de uno mismo.
CAUSAS. Las causas por las que se establece la presión social, pueden ser variadas. Por ejemplo, durante la adolescencia, puede ser a causa de la necesidad de pertenecer a un grupo social y durante la edad adulta, puede deberse por el miedo al rechazo social. Muchas personas pueden verse afectadas por éste fenómeno a cualquier edad, ya que el rechazo es mayor, cuando se siente que otras personas han cumplido esos objetivos establecidos en la sociedad mientras ellos se han quedado al margen. Esto ocurre como en la expectativa de tener hijos a una cierta edad o etapa de la vida, o por no haberse casado con una serie características anteriormente.
Para saber como enfrentar a la presión social, es importante tener en cuenta, los límites que son necesarios implantar cuando la circunstancia lo requiere, ya sean límites con las relaciones personales y amistades, fortalecer el autoestima o marcar distancias con aquellas personas que quieran influenciarnos en la toma de nuestras decisiones.