La rosa mosqueta, es una de las plantas que nos regala la naturaleza, debido a los secretos que guarda para cuidar y mantener la salud de nuestra piel al incluirla en nuestros cuidados. Desde hace siglos, las propiedades de esta planta se determinan altamente beneficiosas a nivel dermatológico, ya que antiguamente, se usaba para curar heridas, hidratar la piel y tratar diferentes dolencias.
Podemos encontrar la rosa mosqueta en diversos formatos, ya sea en jabón, en aceite, en crema o en mascarillas y champús, ya que entre sus propiedades destacan: los ácidos grasos esenciales como el omega 3, las vitaminas A, C o E, y además, contiene antioxidantes naturales como el retinol. Dichas propiedades, tienen su aportación de beneficios, que van directos a la salud y cuidado de nuestra piel:
- Actúa como regenerador celular.
- Ayuda al proceso de cicatrización y minimiza las marcas visibles.
- Atenúa y suaviza, tanto las manchas como las arrugas.
- Previene y reduce las estrías.
- Reduce las marcas del acné.
- Nutre la piel en profundidad.
- Estimula la circulación sanguínea.
- Tonifica todo tipo de pieles.
- Hidra y tensa la epidermis.
- Apta para aplicar en bebés y en todas las edades.