La maduración de la carne, es un factor clave en el proceso de cuidado y control exhaustivo, para que estos productos sean de calidad. Como bien hemos podido percatarnos en muchas situaciones, lo bueno tarda en llegar, y es que para consumir este tipo de carne, este dicho tiene toda la razón, pues su tiempo de maduración, es mediante un proceso natural, el cual requiere tiempo para que finalmente, tenga una textura suave y cremosa.
El periodo de tiempo que requiere para la maduración, consta de 15 a 30 días, lo suficiente como para que las fibras musculares se rompan y se elimine la humedad, para finalmente, ganar terneza y potenciar más su sabor. Aunque existan dos métodos de maduración, la húmeda y la seca, en Europa la que más se emplea es la segunda forma. El proceso de maduración, requiere además un equipamiento de cámaras especiales así como también otras condiciones de ventilación, temperatura controlada y humedad, por lo que es compleja madurar la carne de forma casera.
Los beneficios que se pueden distinguir tras la maduración de la carne son:
- Más jugosidad de la carne.
- Resalta más el aroma y el sabor natural de la pieza.
- Carne mucho más tierna.
Cualquier persona que le guste la carne, experimenta con gran gusto el probar este tipo de carne y aunque implique un gasto económico mayor a otras carnes, es u