Se denomina hipotermia, al descenso de la temperatura corporal por debajo de treinta y cinco grados que es el límite establecido como normal. A raíz de este margen, los mecanismos encargados de compensar la regulación de la temperatura corporal, empiezan a fallar. Frecuentemente, esto suele suceder a consecuencia de una exposición continua y prolongada a temperaturas mínimas, sin proteger al cuerpo de forma adecuada. La hipotermia en bebes y en niños. puede ser complicada de detectar, ya que ellos por sí mismos, no pueden expresar bien el sentimiento de frío.

La hipotermia, puede manifestarse a cualquier edad y en cualquier estación del año, aunque es más frecuente en las épocas invernales donde las temperaturas tienen un descenso importante. Aunque pueda padecerse por cualquier persona, hay que destacar que lo más propensos en manifestarlo, son los recién nacidos y los niños más pequeños, debido a que su organismo, aún está evolucionando y los mecanismos para regular su temperatura corporal, no se encuentran totalmente desarrollados. Las causas más comunes por las que puede aparecer la hipotermia en bebes y niños, suele ser por una protección inadecuada ante las bajas temperaturas, por la exposición a elementos muy fríos con el objetivo de bajarles la fiebre o por permitir que lleven ropa húmeda durante un tiempo prolongado, en ambientes fríos.

Los síntomas a los que debemos fijarnos para detectar y tratar un caso de hipotermia en bebés y niños cuanto antes, son:

• Disminución del pulso y la respiración.
• Temblores corporales.
• Falta de reflejos.
• Piel fría, palidez o en caso de recién nacido, piel con un tono rosado.
• En los recién nacidos, hay que estar más pendientes de su temperatura, sus cambios de comportamiento o su falta de apetito, debido a que son incapaces de manifestar la sensación de frío.