Todas las partes de nuestro cuerpo están conectadas entre ellas, por esta razón, los problemas de un área del mismo, puede ocasionar daños en otras partes distintas, como ocurre entre la demencia y la salud dental. El echo de no cuidar la salud bucodental, ocasiona enfermedades odontológicas, teniendo también otras consecuencias como en zonas alejadas de la boca y favorecer por tanto, la aparición de trastornos como la demencia. Hay que tener en cuenta, que los pacientes que padecen dicho trastorno, no pueden realizar actividades de la vida diaria por sí mismos, por lo que si cuentan con la ayuda de otra persona, el cuidado de su salud bucodental puede verse dañada.
Las personas que descuidan la higiene de las piezas dentales y tienen una deficiente higiene oral en general, tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades dentales, ya que en en ella se acumulan muchos gérmenes y bacterias. Es más, cuando la patología ya es existente, sigue existiendo una relación estrecha con la boca, pues la demencia tiene un gran impacto negativo en la salud bucodental, ya que imposibilita a la persona a realizar las tareas cotidianas y el mantenimiento de sus cuidados. Por esta razón, pueden aparecer enfermedades periodontales, progresión de las caries, pérdida de algunas piezas dentales y otras lesiones no tratadas. Los problemas más frecuentes en la salud dental por culpa de la demencia son:
- CARIES DENTAL. La falta de higiene y las dietas abundantes en azúcares, favorecen la aparición de las caries, por lo que las personas con demencia, si no cuentan con la ayuda de otra persona para cuidar de ello, son más propensas a tenerlas.
- SEQUEDAD BUCAL. Este es un problema muy común en pacientes con demencia, sobre todo en aquellos que consumen antidepresivos y sedantes, pues muchos medicamentos para tratar su enfermedad, tienen como efectos adversos, la disminución en la producción de saliva.
- ENFERMEDADES PERIODONTALES Y GINGIVITIS. Cuando la higiene bucodental no es efectiva, los restos de comida y las bacterias, se van depositando y acumulando sobre las encías y las superficies dentarias, dando lugar a la placa bacteriana. De no eliminarse con un buen cepillado diario, se puede ir calcificando y dando lugar al sarro.
Sin duda, debemos ayudar a todas aquellas personas que padecen demencia, a mantener el cuidado adecuado de su salud bucal y general, con el objetivo de evitar cualquier otro desarrollo de enfermedades.