Tal y como su nombre indica, los libros sensoriales ayudan a estimular los sentidos de los bebés y potencian su aprendizaje en cada una de sus etapas. Como bien sabemos, todo libro forma buena parte de nuestra infancia, pues son los que nos transportan a mundos imaginarios y los que nos acompañan en cada noche antes de ir a dormir. No obstante, estos libros sensoriales no tienen por qué ser leídos por padres, abuelos o tíos, ya que no es necesario que el niño o niña, sepa leer para que puedan disfrutarlo. Estos libros sensoriales, son aptos para bebés de seis meses en adelante, pudiendo llegar a ser su objeto favorito.
Los libros sensoriales, pueden tener varios tamaños, siendo más pequeños que los habituales o incluso más grandes, y están fabricados de diversos materiales como fieltro, goma Eva, telas o cartón. Entre su contenido, encontramos imágenes y textos, que presentan sonidos, texturas, luces e incluso sonidos, por lo que son realmente especiales para estimular los sentidos y el aprendizaje de los bebés. Este tipo de libros, pueden fabricarse por nosotros mismos, ya que a día de hoy podemos encontrar el método más sencillo para elaborarlo por diferentes medios, y hacerlos todo lo personalizado que queramos.
Los bebés al tener un libro sensorial, exploran y conocen el entorno que les rodea, mediante la información y los estímulos que transmiten estos, por lo que su descubrimiento y aprendizaje, les sirve también para desenvolverse por sí mismos en el ambiente. La característica más importante de los libros sensoriales es por tanto, es que son una excelente herramienta pedagógica. Además, se considera realmente imprescindible en cualquier hogar que habiten niños y niñas. Se puede obtener en varias modalidades, como por ejemplo los libros de baño para que lo utilicen en la bañera, los que permiten explorar texturas y tactos diferentes, los de sonidos y canciones o los que cuentan con elementos de quitar y poner como velcros y botones.
Son objetos inspirados en la filosofía, con el objetivo de promover el aprendizaje y el desarrollo de habilidades físicas en la infancia, al proporcionar varias experiencias sensoriales adaptadas a edades muy inferiores, por lo que son ideales para despertar su curiosidad y atención.