La clasificación energética es un sistema de etiquetado que califica la eficiencia de la vivienda. Esta clasificación va más allá de los electrodomésticos, también abarca la eficiencia de otros aspectos cruciales del hogar, como los sistemas constructivos, la climatización o los sistemas de suministro de agua.
Igualmente, los propios electrodomésticos también se catalogan mediante la misma tabla de clasificación. Comprender estas clasificaciones es esencial para crear un hogar verdaderamente sostenible y eficiente.
La clasificación energética viene representada por etiquetas que van desde la A hasta la G y nos proporciona un análisis e información importante sobre el estado de la eficiencia de una vivienda. Entender el significado de cada una es esencial para poder tomar decisiones que mejoren y optimicen el consumo de energía en el hogar.
Clase A. Excelente eficiencia energética
La etiqueta clase A nos indica la máxima eficiencia energética posible en una vivienda. Los electrodomésticos y sistemas con esta clasificación son realmente eficientes y contribuyen significativamente en el ahorro de energía. Optar por este tipo de productos es clave para minimizar el impacto ambiental y reducir al máximo las facturas de los suministros.
Clase B y C. Eficiencia moderada
Las etiquetas B y C indican una muy buena eficiencia energética. Aunque no alcanzan el nivel de excelencia de la clase A, esta clase aún nos asegura un rendimiento respetable con un consumo realmente bajo. Los electrodomésticos y sistemas con esta clasificación son opciones viables para aquellos que buscan un equilibrio entre eficiencia y presupuesto.
Clase D a G. Menos eficientes
Las viviendas por debajo de la etiqueta D son las menos eficientes que podemos encontrar en el parque inmobiliario. Suelen ser construcciones antiguas o aquellas que cuenten con unos electrodomésticos y sistemas menos eficientes en términos de consumo energético. Esta categoría puede implicar un mayor gasto energético y, a largo plazo, en facturas más elevadas.
¿Cuáles son los electrodomésticos que más consumen?
- Aire acondicionado. Si bien son totalmente necesarios en climas cálidos, los aires acondicionados de baja eficiencia pueden ser grandes consumidores de energía. Busca modelos de clasificación energética alta y considera reemplazarlos por opciones que demanden menos energía como los ventiladores.
- Frigoríficos y congeladores. Al tratarse de electrodomésticos que están en continuo funcionamiento, es crucial elegir modelos de clase A o superior para minimizar el gasto energético.
- Secadoras. Consumen mucha energía debido al calor que tienen que utilizar para secar la ropa. Optar por el tendido al aire libre o utilizar una secadora altamente eficiente puede marcar la diferencia.
Otros aparatos que también consumen
Todo aquello que está enchufado a la corriente conlleva cierto consumo eléctrico, además de los recién mencionados, podemos destacar algunos otros como:
- Hornos. Debido a la gran temperatura a las que tienen que ser sometidos para cocinar, estos electrodomésticos también consumen mucha energía. Es importante hacer un uso responsable del horno ya que se trata de uno de los aparatos que más consume en nuestra cocina.
- Lavavajillas. Al igual que las lavadoras, los lavavajillas necesitan calentar agua para limpiar a fondo nuestra cubertería, así que, es recomendable utilizar siempre que sea posible el programa ECO y no ponerlo en funcionamiento hasta que esté totalmente cargado.
- Lavadoras. Estos electrodomésticos requieren de cierta potencia eléctrica para funcionar, no solo para ponerse en marcha, sino también para calentar el agua que utilizan.
Consejos para ahorrar con electrodomésticos eficientes
- Incentivos y descuentos. Aprovecha los programas de incentivos y descuentos ofrecidos por el gobierno o los fabricantes para adquirir electrodomésticos eficientes a precios más accesibles.
- Investigación previa. Antes de comprar, verifica la clasificación energética que, por normativa, todo electrodoméstico debe tener. Compara los modelos y realiza un correcto balance economía – eficiencia para ajustarte a tus necesidades.
Al usarlos
- Mantenimiento regular. Asegúrate de mantener tus electrodomésticos en condiciones óptimas. Limpia los filtros, verifica los sellados de sus piezas y realiza un mantenimiento preventivo para asegurar un rendimiento eficiente.
- Horarios de bajo consumo. Utiliza electrodomésticos durante las horas del día con tarifas eléctricas más bajas. Programa el funcionamiento de lavadoras y lavavajillas para aprovechar estas ventanas de menor coste.
Al reemplazarlos
- Reciclado responsable. Al desechar electrodomésticos antiguos, asegúrate de hacerlo de manera ambientalmente responsable llevándolos a los puntos limpios correspondientes o utilizando los programas de reciclado que ofrecen algunos fabricantes.
Tu compromiso con la eficiencia energética merece ser respaldado. Asegura tus electrodomésticos eficientes con un Seguro de Hogar y vive con la seguridad de un hogar protegido