Todas y cada una de las lentillas, independientemente del tipo que sean, tienen la misma forma y se colocan en la misma superficie del ojo, es decir, sobre la córnea, para finalmente corregir defectos de visión. Generalmente, excepto las lentillas cosméticas, tienen una función similar a unas gafas convencionales correctivas. Estas pueden ser simples o de colores, dependiendo de las preferencias entre unas y otras o de la necesidad y gustos de cada persona que las necesite. No obstante, hay que considerar siempre las recomendaciones que pueda indicar el profesional de la salud ocular, ya que dependiendo de cada variable, puede recomendar un tipo de lentilla en concreto.
SEGUN SU VIDA UTIL. Estas son clasificadas por el tiempo que pueden llevarse puestas. Hasta hace unas décadas, las lentillas debían de quitarse por las noches para dormir y limpiarlas, para volver a usarlas por un largo periodo de tiempo. Actualmente, se clasifican en categorías, para que pueda elegirse la más adecuada.
- DESECHABLES. De un día o una semana, y se puede dormir con ellas.
- DE REEMPLAZO FRECUENTE. De dos semanas e incluso un mes, no se puede dormir con ellas.
- DE USO CONTINUADO. De uno a dos años de duración, si se usan de forma efectiva.
SEGUN SU FUNCIÓN O DISEÑO. En ellas encontramos las clasificadas según su funcionalidad, para tratamientos correctivos de la visión o para temas cosméticos, como por ejemplo el cambio de color. Pueden ser: bifocales, multifocales y progresivos, lentillas esféricas para proporcional la misma visión en toda la superficie, lentillas tóricas para tratar el astigmatismo, la miopía o hipermetropía y las lentillas cosméticas, para cambiar de color los ojos según las preferencias.
SEGUN EL MATERIAL. Es el primer aspecto a considerar antes de hacer el uso de las lentillas, ya que estas varían en cuanto a su material.
- DE METACRILATO DE POLIMETILO. Caracterizadas por su resistencia a ralladuras y por su gran transparencia. Fueron de las primeras en el mercado, con el inconveniente de que no permitían un buen paso del oxígeno.
- DE ELASTOMEROS. Estas son permeables a los gases, produciendo la misma sensación que las primeras y misma visión, con la diferencia de que sí pasan de forma correcta el oxígeno.
- DE HIDROGEL. Están fabricadas de materiales más delgados, maleables y porosos que permiten mayor paso del oxígeno.
- HIBRIDOS. Mezclan materiales de silicona e hidrogel en la periferia y en el centro, proporcionado las ventajas de las anteriores.
Actualmente, son los profesionales ópticos quienes nos recomiendan cada tipo en función de nuestras enfermedades oculares, por lo que si queremos uno en especial, solo debemos comentarlo y seguir las recomendaciones indicadas, para cuidar nuestra salud visual de forma óptima.