El ibuprofeno, al ser un medicamento, puede crear varios efectos secundarios o adversos, tal y como sucede con otros medicamentos. En muchas ocasiones, se hace un consumo inapropiado de los medicamentos más habituales como el ibuprofeno, sin respetar el tiempo del tratamiento ni las dosis adecuadas. Se trata de un medicamento muy demandado y habitual, debido a que actúa como antiinflamatorio, antipirético y analgésico, pero su abuso en cuanto a dosis diarias, puede provocar consecuencias negativas para nuestro organismo y molestias como la diarrea o el malestar abdominal.
Lo más recomendable para evitar que suceda lo anterior comentado, es acudir a un profesional médico ante cualquier dolor o molestia, para que nos recete el medicamento o pautas adecuadas. En circunstancias en los que los dolores padecidos son leves, se puede recurrir a tratamientos o medidas naturales, ya que pueden contribuir al alivio de dolores, siempre y cuando se haya consultado con un médico para valorarlo. Estas alternativas naturales, son:
- Jengibre. Tiene efectos antiinflamatorios y antioxidantes, utilizándose también de forma externa para tratar casos de artritis. golpes o torceduras.
- Pimienta de cayena. La capsaicina que contiene como ingrediente de la cayena, aporta propiedades antiinflamatorias y un extra de sabor y picante en los platos.
- Cúrcuma. En la medicina ayurvédica, era muy utilizada, para el tratamiento de las afecciones inflamatorias. Puede servir para apoyar a los tratamientos de las afecciones oxidativas e inflamatorias, la ansiedad, la artritis o el síndrome metabólico.
- Árnica. Ha sido utilizado como remedio homeopático, para el tratamiento de afecciones inflamatorias, para aliviar el dolor y en fases postoperatorias, gracias a sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias.
Antes de comenzar a tomar una decisión alternativa al ibuprofeno, si estas bajo un tratamiento médico, es importante que no lo abandones sin previa valoración médica, pues las alternativas naturales mencionadas, con recomendadas únicamente, en casos de dolores leves que no presentan una enfermedad grave.