La lipodistrofia, se trata de una enfermedad rara que requiere atención para que los afectados, puedan recibir un tratamiento adecuado y efectivo. El día mundial de las Lipodistrofias, se celebra cada 31 de marzo, para seguir recordando la importancia de los esfuerzos por encontrar una solución. Las enfermedades raras, siguen siendo una de las cuentas pendientes de todos los sistemas sanitarios del mundo. Enfocándonos en la lipodistrofia, es una enfermedad que altera el tejido adiposo,
La transcendencia del tejido graso en el cuerpo, tiene la función esencial de almacenar la energía, influyendo en el equilibrio metabólico, por lo que quienes padecen de lipodistrofia, tienen reducida dicha cualidad adiposa. Todo ello, hace que el cuerpo busque otra alternativa en otros órganos, para poder albergar la grasa necesaria, por lo que aparece la grasa ectópica, que es aquella que se acumula fuera del tejido adiposo en sí. Esta grasa para quienes padecen esta enfermedad rara, les afecta de manera excesiva al páncreas, a algunos músculos y al hígado.
En consecuencia, el desenlace perjudicial que tiene, afecta a todas las insuficiencias que dicha grasa ectópica puede favorecer. Entre los mayores problemas encontramos;
- Riego elevado en experimentar enfermedades cardíacas.
- Acidosis láctica.
- Triglicéridos elevados en la sangre.
- Diabetes.
- Inflamación del hígado.
- Incapacidad de concretar el embarazo tras un año de intento.
El hecho de resaltar este tipo de enfermedades, es por la razón de que no caigan en el olvido, ya que son muchas las personas y familias que las sufren, por lo que cada 31 de marzo, se celebra con el objetivo de conseguir recursos e informar sobre la misma.