El ruido blanco cada vez se ha echo más popular, al considerarse una estrategia eficaz para conciliar el sueño y combatir el insomnio. Es probable que conozcas a alguien que utiliza este tipo de ruido para dormir, como es el caso de tener la televisión encendida para poder descansar, o que los días de lluvia les ayuda a conseguir dormir más pronto. Debido a tantos casos conocidos, a continuación hablaremos de la capacidad de estos ruidos, para conciliar el sueño de forma efectiva, pues no a todas las personas, les puede ofrecer el mismo efecto.
Gracias a su popularidad, se han creado miles de aplicaciones con numerosos ruidos blancos, y es que éste color, es la suma de todos los tonos de color existentes, del mismo modo que todos los ruidos blancos, son la mezcla de todas las frecuencias sonoras. Este sonido, tiene la capacidad de estimular la gran mayoría de las células sensoriales auditivas, por lo que se percibe como constante, uniforme y monótono. Este tipo de sonidos, los podemos encontrar en plena naturaleza, como es el caso del viento soplando las hojas o la caída de la lluvia.
Además. también podemos encontrar estos sonidos en situaciones del día a día, como el sonido que emite una radio sin sintonizar, el sonido del secador o el ruido sordo y continuo que emiten ciertos electrodomésticos, ya que también son considerados como ruidos blancos. Uno de los principales efectos positivos del ruido blanco, es que impide que otros estímulos lleguen a detectarse o alcanzar la corteza cerebral, generando un relajante y placentero efecto, que disminuye la activación y el estado de alerta.
En segundo lugar, el ruido blanco también es utilizado en entrenamientos orientados a la recuperación de la pérdida auditiva, pues se ha comprobado que puede ser de gran utilidad para mejorar ciertos síntomas del trastorno de déficit de atención hiperactivo. Tal y como mencionábamos en el primer párrafo, estos sonidos no tienen por qué causar el mismo efecto en todas las personas, pues aunque a algunos les otorgue paz y tranquilidad, a otros sin embargo, les puede inquietar más o ponerles nerviosos.