Al ventilar el hogar, permitimos que el aire se renueve y se elimine el dióxido de carbono que expulsamos al respirar. Esta costumbre, siembre se ha creído necesaria y muy habitual por parte de nuestros abuelos, aunque mucha gente piensa que se trata de un hábito que sirve solo para eliminar los malos olores, pero lo cierto es que tiene varios beneficios. Actualmente, cada vez es más frecuente que la gente que la gente fume dentro del hogar, y otra mayoría, tienen trabajos que les impide limpiar la casa con tanta frecuencia como se hacia antiguamente, debido a las largas jornadas.
Por estas razones, se pueden acumular sustancias nocivas para nuestra salud y, debido a los confinamientos que se impusieron en varios países durante la pandemia, provocó que todo el mundo permaneciese dentro de su casa o de sus habitaciones más tiempo de lo normal. A continuación, explicaremos cuales son los beneficios de ventilar la casa con frecuencia.
Como bien sabemos, al respirar eliminamos el dióxido de carbono del cuerpo por la razón de que resulta tóxico por el para el organismo, razón por la que es tan importante. De no dejar que el aire de nuestra casa se ventile, no sólo acumularemos dióxido de carbono, sino que también pueden acumularse otras sustancias nocivas, como el humo del tabaco o el humo generado tras cocinar. De la misma forma ocurre con las calderas, chimeneas o estufas, ya que los gases que emiten también pueden acumularse.
Al ventilar nuestro hogar, el aire se cargará de oxígeno y se regulará la humedad, al igual que eliminaremos los malos olores y las partículas en suspensión e incluso el polvo.