El entrenamiento funcional, es un método de preparación física que tiene como objetivo fortalecer y mejorar condiciones, según las exigencias individuales. Este tipo de entrenamientos, permiten reducir de forma significativa el riesgo de lesiones, pues en el caso de los deportistas, en el que los esfuerzos se sitúan hacia los grupos musculares que mayor desgaste asumen, se incremente el rendimiento a corto, medio y largo plazo. Al tratarse de un entrenamiento que tiene muchas aplicaciones efectivas, a continuación describiremos los beneficios más característicos que ofrece.
Identificar el entrenamiento funcional puede ser confuso, aunque teniendo la información clara, podemos conseguir caracterizarlo sin ningún inconveniente, teniendo en cuenta lo siguiente:
- Tiene una funcionalidad generalizada: el entrenamiento funcional, trabaja de forma general buscando beneficios multiarticulares y de coordinación entre los músculos.
- Existes aceleraciones: durante las rutinas, se desarrollan etapas de aceleración y desaceleración mediante ejercicios excéntricos o concéntricos.
- El cuerpo no tiene apoyo: en la realización del entrenamiento funcional, el cuerpo no se establece sentado ya que limitaría la efectividad sobre la musculatura estabilizadora.
- Peso libre: esto permite tener una fluidez mayor en la práctica al ejecutarse con herramientas de entrenamiento como los balones medicinales, las barras o las mancuernas, evitando las limitantes producidas por las máquinas.
La mayor ventaja que nos aporta el entrenamiento funcional, es que aporta a nuestro cuerpo muchos instrumentos para afrontar las actividades cotidianas disminuyendo el riesgo de lesiones y con un mayor rendimiento, ya que mejora la resistencia, el equilibrio y la fuerza según las necesidades. Por otro lado, la repetición de movimientos hace que se extienda la sensibilidad de ejecución, la fuerza alcanzada y el tiempo de respuesta. Como mencionábamos anteriormente, existe menor peligro de lesiones ya que tanto los músculos como los ligamentos se refuerzan.
Otros de los beneficios más importantes que tenemos que tener en cuenta del entrenamiento funcional, es que perfecciona la estabilización, desde músculos pequeños que apoyan a los de mayor tamaño, corrigiendo de tal forma los problemas de postura.