El café puede conseguir mantenernos activos para empezar el día y afrontarlo con más energía. No obstante, hay que recordar que para que sea beneficioso y bueno para nuestra salud, debemos hacer un consumo diario adecuado.
Es una de las bebidas más populares del mundo, ya que aporta una gran fuente de minerales esenciales, antioxidantes y múltiples beneficios y propiedades como:
- Reducir el riesgo de padecer enfermedades hepáticas, como la cirrosis.
- Destaca el aporte de vitaminas del grupo B para nuestro organismo, y minerales esenciales como el magnesio, el manganeso y el potasio, que son de vital importancia para los procesos bioquímicos.
- Estimula el sistema nervioso central, aumentando los niveles de dopamina y norepinefrina, ya que aceleran la actividad cerebral.
- Previene el riesgo de padecer diabetes de tipo dos, gracias a su contenido en cafeína, que incrementa la cantidad de proteínas plasmáticas haciendo que se regule la actividad de testosterona y estrógeno.
Como otros alimentos, es importante recordar que también puede tener efectos secundarios si se consume de forma inapropiada o en exceso, como el aumento de los niveles de ansiedad, la acidez estomacal, la formación de úlceras, el aumento en la presión sanguínea y también puede provocar el insomnio.