El melón al igual que la sandía, son las frutas que más nos refrescan gracias a su rico sabor y frescor. Gracias a estas frutas, obtenemos grandes beneficios para mejorar el estado de nuestra salud, pero como ocurre con muchos otros alimentos, existen mitos que ponen en duda sus propiedades y beneficios. El consumo regular de vegetales y frutas, es positivo para la salud, por lo que al comer frutas variadas, estamos aprovechando nutrientes distintos, ya que las frutas destacan sobre todo por su contenido en antioxidantes, micronutrientes y sustancias que ayudan a reducir la probabilidad de padecer enfermedades complejas.
A continuación desmentimos los mitos más comunes que existen sobre el delicioso melón.
- «El melón engorda». Gracias a la dieta mediterránea se ha demostrado que el melón ayuda a mantener una composición corporal adecuada, por lo que su consumo no incrementa el peso.
- «La sandía es más sana que el melón». Como decíamos anteriormente, tanto la sandía como el melón, son frutas del verano muy recomendables de consumir, debido a que ambas son hidratantes, diuréticas y saludables. En cuanto a este mito falso, cabe destacar que la sandía tiene menos fibra que el melón, por lo que sacia menos.
- «El melón tiene mucho azúcar». Su contenido en azúcar, es muy reducido en cuanto al peso total del mismo. Ciertos estudios consideran que los glúcidos del melón no son perjudiciales, sino los azúcares añadidos posteriormente.
- «El melón es muy diurético». Al igual que la sandía, el melón está compuesto por agua, pero no por ello quiere decir que presente más propiedades diuréticas. Está calor que cuanto más cantidad de líquidos se consume, más se aumenta la cantidad de orina.
El melón, es una de las frutas del verano más ricas en cuanto a sus propiedades, frescor y sabor, por lo que incluirlo en tu dieta acompañado de otros alimentos como el jamón o con yogurt, te aportará grandes beneficios para cuidar de tu salud y bienestar.