La herpetofobia, es el miedo excesivo a los reptiles y a algunos anfibios, y al tratarse de un miedo tan exagerado, puede tener serias consecuencias para la salud. Muchos reptiles, anfibios o arácnidos, son animales que con mayor frecuencia, generan malestar a muchas personas, debido a la amenaza que pueden representar. En algunas personas, este tipo de malestar es mas intenso, generándoles un miedo irracional y exagerado, conocido como fobia. Del grupo de animales anteriormente mencionado, los que más suelen generar mayor temor son; los lagartos, las serpientes, las ranas e incluso los sapos.
Se trata de una de las fobias específicas que existen, ya que son un trastorno de ansiedad común e incluso generarse por haber tenido una experiencia negativa en alguna etapa de su vida. Los trastornos vinculados a animales como la herpetofobia o la aracnofobia, suelen ser los más frecuentes, y en términos adaptativos, es normal temer a algunos animales que presenten peligros que amenacen a la salud de las personas.
Las causas por las que se padecen esta enfermedad, pueden ser tras la experiencia vivida en alguna etapa, como por ejemplo haber sufrido durante la infancia la mordedura de una serpiente, por el aprendizaje de temer a ciertas cosas concretas, como por ejemplo aprender del miedo del padre o madre hacia un sapo o por la herencia de algún familiar que haya temido por ejemplo a los reptiles.
Uno de sus principales síntomas, es la ansiedad abrumadora o miedo intenso ante la presencia de alguno de los animales mencionados, y pueden presentarse los siguientes síntomas, de manera adicional:
- Opresión en el pecho.
- Dificultad para respirar.
- Náuseas.
- Sudoración.
- Taquicardia,
- Temblores.
Dichos síntomas, no sólo pueden presentarse en el momento de ver a uno de esos animales, sino que también pueden manifestarse tras pensar en ellos, al escuchar hablar de los reptiles o anfibios, o al ver una foto o video de estos animales temidos.