La obesidad infantil, cada vez es más creciente, y a consecuencia de ello se, ha convertido en una de las enfermedades pediátricas más frecuentes. Tanto el sobrepeso como la obesidad infantil, son condiciones de la salud en crecimiento, especialmente por los avances tecnológicos y los cambios de costumbres de los más pequeños. Hay que tener en cuenta, que no toda la culpa de este problema sean los nuevos avances tecnológicos, sino los hábitos de vida a los que estén acostumbrados a llevar los niños y niñas, por lo que hay que mantener siempre una actividad adecuada para no entorpecer a su desarrollo físico y mental.
Debido a que la obesidad infantil es una enfermedad multifactorial, deben combinarse varios determinantes para que esta misma se produzca, pues puede desarrollarse por una mala alimentación, sedentarismo o por hábitos nocturnos poco saludables. Los padres, son los que tienen que prestar mayor atención a cada uno de estos motivos y buscar la manera de guiar a los hijos hacia estilos de vida más saludables.
Para comenzar de buena manera, sería adecuando la dieta balanceada, la cual debe ser rica en vegetales, proteínas y con pocos alimentos ultra procesados o sintéticos. En segundo lugar, se debe procurar cuidar los hábitos de sueño, priorizando su descanso nocturno en cualquier edad, durante al menos 8 horas, que son las recomendadas, para conseguir un sueño reparador. También, debemos intentar controlar el tiempo que dedican a las tecnologías, especialmente a los videojuegos u otros contenidos digitales, pautando una estrategia de uso responsable y adecuado.
Por último y muy importante, es promover la realización de deportes u otras actividades físicas al aire libre, pues no sólo les brindará efectos positivos para su salud física, sino que también, les ayudará a prevenir la obesidad y mejorar tanto su salud psicológica como emocional. Los deportes y actividades más recomendadas para conseguirlo son:
- Ciclismo y natación.
- Juegos alternativos y paseos o caminatas.
- Baloncesto, fútbol y voleibol.
Aunque existan otros muchos más deportes, los anteriores mencionados resultan más beneficiosos debido a que no son difíciles de encontrar, promueven unos mejores hábitos de vida saludables y contribuyen a romper con el sedentarismo.