Emergencia dental

Las emergencias dentales, suelen ser situaciones incómodas y molestas, que pueden generar dudas sobre si requiere atención por parte de un odontólogo, por lo que en este artículo, veremos cuáles son las circunstancias más frecuentes y cómo debemos actuar en cada caso. Lo primero que debemos tener en cuenta, es que la emergencias dentales, les puede suceder a cualquier persona, independientemente de los cuidados que le `preste cada uno a la salud bucal y en cualquier momento.

Se entiende por emergencia dental, toda aquella situación grave que afecta tanto a las piezas dentales como a la mucosa oral, requiriendo una atención temprana para ponerle solución. Los síntomas que pueden padecerse tras una situación como esta, afecta al funcionamiento de la vida normal de toda persona e incluso a sus relaciones sociales. Además, una emergencia dental, puede sufrirse por un accidente, traumatismo o por la evolución de una infección o problema dental que no ha sido tratado a tiempo.

Para hacernos una idea mejor, a continuación observamos algunas situaciones que se consideran emergencias dentales:

  • Fractura de una pieza dental. Tras recibir un golpe brusco o morder algo demasiado duro, los dientes pueden quebrarse y en el peor de los casos romperse, por lo que la pérdida de una parte del diente o la pieza dental entera, es una emergencia dental, ya que no sólo afecta a la estética sino que también afecta al correcto funcionamiento bucal.
  • Infecciones y abscesos. El cúmulo de pus e infecciones, pueden dar lugar a serios problemas que necesitan una atención rápida. En el caso de los abscesos que se ubican en la raíz de las piezas dentales, puede dañar a la encía e incluso extenderse a otros tejidos de la zona, por lo que es importante acudir al odontólogo lo más rápido posible, para evitar la propagación y gravedad de la situación.
  • Dolor de una o varias piezas dentales. La presencia de caries avanzadas, pueden ocasionar dolores extremos en el diente afectado, pero también, este dolor puede ser a causa de la pericoronaritis, las infecciones o las piezas retenidas. Este caso sin duda, es de los más comunes, por lo que es importante prestar atención al dolor que genera, si aparece o empeora ante estímulos como el frío, el calor o el dulce, para visitar al odontólogo y poner remedio.

Como puedes observar, no todas presentan la misma gravedad pero si generan molestias que interrumpen la vida cotidiana de quienes las padecen, por lo que prevenir que sucedan acudiendo a las revisiones anuales y actuando con mayor rapidez, podrá ayudar a que el problema sea más dañino.