Ansiedad dental

La ansiedad dental, supone un riesgo para la salud bucodental de las personas que la padecen, pues los nervios y el miedo al acudir al dentista, son la razón por la que se desarrolla este tipo de ansiedad. En el algunos casos, las personas que tienen ansiedad dental, pueden llegar a evitar las visitar al odontólogo por culpa de la misma, por lo que ponen en riesgo su salud bucal. La ansiedad es un estado emocional que nos ayuda a defendernos en situaciones de peligro o amenazantes, pero en ocasiones, esta respuesta, puede desarrollar un desorden psicológico, tal y como se da en el caso de la ansiedad dental.

Este tipo de ansiedad, es un estado emocional que se presenta con ciertas sensaciones que resultan desagradables, llegando a generar cambios psicológicos, simplemente pensando en tratamientos odontológicos. El miedo a los procedimiento dentales, también genera una respuesta de defensa, la cual se manifiesta tanto física como mentalmente. Ante esta situación de miedo exagerado, se convierte en un impedimento para que el paciente acuda al dentista, se aplacen los tratamientos, se cancelen las citas, y el dolor y la salud, se soporten durante más tiempo, agravando de tal forma los daños causados.

Las razones que pueden llevar a una persona a padecer la ansiedad dental, son variados, por lo que a continuación te mostramos algunos de ellos:

  • Debido a experiencias dentales traumáticas del pasado, sobre todo durante la infancia.
  • Por la influencia de familiares que padecen ansiedad dental.
  • Por miedo irracional a la anestesia, a las heridas, a la sangre, al dolor y a los pinchazos.
  • Debido a la falta de espacio personal y a la falta de control.
  • Por características propias de cada personalidad.

La ansiedad dental, se trata de un fenómeno multidimensional, ya que es una respuesta defensiva en la que interactúan componentes cognitivos, motores y fisiológicos. La combinación de estos aspectos, hace que el paciente experimente diferentes tipos de sensaciones incómodas, ocasionando afecciones como mareos, palpitaciones, falta de aire y transpiración.