Aunque suene divertido y raro a la vez, debemos destacar que se trata de una afección cardíaca que suele presentarse en personas sin ninguna patología previa y que ocurre de manera frecuente durante las celebraciones debido a los excesos. Uno de sus síntomas principales, es la presencia de latidos más fuertes en el corazón, conocidos como aceleraciones cardíacas, y al palpitar de tal forma, algunos lo definen como si el corazón quisiera salirse. No obstante, otras personas lo presentan con otra clase de síntomas, como mareos, dolores en el pecho, dificultad para respirar e incluso con pérdidas de la conciencia, lo que requiere una atención de urgencia.
El corazón festivo o corazón en vacaciones, puede ser motivo de un exceso de alcohol, por fuertes emociones o por ambas a la vez, provocando que el corazón palpite más rápido y fuerte, lo que puede considerarse como un tipo de arritmia cardiaca o en otras ocasiones, como insuficiencia cardiaca al no bombear la cantidad de sangre suficiente.
El alcohol es una sustancia tóxica tanto para nuestro organismo como para el corazón, teniendo efectos aun más graves al consumirse de forma excesiva, y por tanto, contribuye a liberar más adrenalina y noradrenalina, hormonas que crean un aumento en el ritmo cardiaco.
Destacamos que este síndrome se manifiesta en personas que no tienen patologías cardiacas, por lo que el consumo de alcohol es peligroso para todas las personas, tanto si están sanas como si no. Para prevenir que esto ocurra, se debe evitar el consumo excesivo de alcohol, no sobrepasando el limite de beber más de dos copas.